Capítulo Uno
Voy andando por la calle
Hay un agujero profundo en la acera
Me caigo
Estoy perdida… No sé que hacer
No es culpa mía.
Tardo siglos en salir.
Voy andando por la calle
Hay un agujero profundo en la acera
Me caigo
Estoy perdida… No sé que hacer
No es culpa mía.
Tardo siglos en salir.
Capítulo Dos
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Hago como que no lo veo
Me vuelvo a caer.
No puedo creer que me haya caído en el mismo sitio.
Pero no es culpa mía.
Tardo bastante tiempo en salir.
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Hago como que no lo veo
Me vuelvo a caer.
No puedo creer que me haya caído en el mismo sitio.
Pero no es culpa mía.
Tardo bastante tiempo en salir.
Capítulo Tres
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Veo que está ahí
Me caigo… es un hábito,
Pero tengo los ojos bien abiertos.
Sé donde estoy
Es culpa mía
Salgo rápidamente.
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Veo que está ahí
Me caigo… es un hábito,
Pero tengo los ojos bien abiertos.
Sé donde estoy
Es culpa mía
Salgo rápidamente.
Capítulo Cuatro
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Lo esquivo.
Voy por la misma calle
Hay un agujero profundo en la acera.
Lo esquivo.
Capítulo Cinco
Voy por otra calle.
Voy por otra calle.
(Portia Nelson)
Este cuentecito refleja muy bien el proceso de aprendizaje del ser humano, y como se vuelve a caer en los mismos errores o pautas de conducta. Se necesitan tres capitulos nada menos para tomar consciencia y poder cambiar las pautas.